El papa Francisco consideró este miércoles que “es el miedo que nos vuelve locos”, cuando un periodista le preguntó sobre la valla que separa la frontera entre Estados Unidos y México.
Como suele ser habitual, el papa Francisco saludó uno a uno a los 70 periodistas que viajan con él, entre ellos la enviada de Efe, y que suele ser un momento para intercambiar algunas frases o darle regalos.
Un periodista italiano comentó al pontífice argentino que acababa de volver de cubrir la información sobre la caravana de inmigrantes que viajaba hacia Estados Unidos y que había visto la valla que llegaba hasta el océano.
Francisco recomendó la lectura de un editorial del diario vaticano “Il Osservatore romano” en el que se cita al secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, que en el primer encuentro del año con los periodistas definió el miedo como “la marca más vendida en el mundo de hoy. Produce audiencia, hace ganar votos y genera click”.
El periodista comentó que “era una locura” lo que había visto, a lo que Francisco asintió: “Sí, es el miedo que nos vuelve locos”.
Francisco siempre ha abogado por “construir puentes y no muros” y durante uno de sus viajes afirmó que “no es cristiano” quien construye muros, en referencia a la intención anunciada por el entonces candidato y ahora presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de completar el muro en la frontera con México.
El papa Francisco emprendió hoy miércoles su viaje a Panamá, donde permanecerá hasta el próximo 27 de enero, para participar en los actos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), además de visitar un centro de detención de menores y un hogar para enfermos de sida.
El Airbus A330 de la compañía italiana Alitalia despegó del aeropuerto romano de Fiumicino a las 09.50 hora local (08.50 GMT) y tiene previsto aterrizar en el aeropuerto Internacional de Tocumen de Panamá a las 16.30 horas (15.30 GMT).
El papa fue despedido al salir de su residencia Casa Santa Marta en el Vaticano por un grupo de ocho jóvenes refugiados de varias nacionalidades que han sido acogidos por el centro Padre Arrupe en Roma.
El pontífice viaja acompañado de una delegación vaticana compuesta por el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin; el sustituto de la Secretaria de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra, en el que es su primer viaje; el prefecto del dicasterio para los Laicos, Familia y Vida, Kevin Farrell; el presidente de la Comisión para América Latina, Marc Ouellet, y el “ministro” de la Comunicación, Paolo Ruffini, entre otros.
También viajan una empleada de los Servicios Técnicos de la Gobernación y el sociólogo francés Dominique Wolton, que ha sido invitado por el pontífice.
Además, acompañan al papa cerca de 70 periodistas, fotógrafos y camarógrafos de televisión.
Su visita a Panamá es su 26 viaje internacional y el 40 país que visitará en estos casi seis años de pontificado, y el séptimo a Latinoamérica, donde ya ha visitado Brasil (2013); Bolivia, Ecuador y Paraguay (2015); Cuba y Estados Unidos (2015), México (2016), Colombia (2017) y Chile y Perú (2018).
Después de 13 horas de vuelo, Francisco llegará a la ciudad de Panamá, donde será recibido por el presidente Juan Carlos Varela y, tras una breve ceremonia de bienvenida, se retirará a descansar en la nunciatura, en la que se alojará.
Durante el camino, cambiará su vehículo por un papamóvil para un primer contacto con los panameños y las decenas de miles de jóvenes llegados hasta este país.
La agenda oficial comenzará el jueves con una visita de cortesía al presidente y después dirigirá un discurso a las autoridades y al cuerpo diplomático panameño.
Mantendrá un encuentro con los obispos de Centroamérica y por la tarde participará en la ceremonia de apertura de la JMJ en el Campo de santa María la Antigua.