-Petróleos Mexicanos, cancela el contrato a 103 concesionarias que formaron parte del “Cártel de Gasolineras” y va por más.
-El SAT encuentra inconsistencias fiscales por 3 mil mdp en 194 gasolineras concesionarias de la paraestatal.
Por Víctor Flores
El desmantelamiento el pasado miércoles de una bodega clandestina de gasolina y diesel en la carretera Mérida-Tixkokob, en un operativo de autoridades federales y estatales, dejó al descubierto que los gasolineros de la península (Quintana Roo, Yucatán y Campeche), también forman parte de la red de corrupción que generó la ordeña de ductos a Pemex.
El operativo que arrojó un saldo de 4 mil litros de combustibles asegurados, 3 mil 600 de gasolina y 400 de diesel, confirma que los concesionarios gasolineros de la región están involucrados en la estructura que ilegalmente robaba gasolina a la paraestatal, en detrimento de los bienes de la nación y que dio paso también al “lavado de dinero”.
No es la primera vez que en la región se detectan bodegas clandestinas de gasolina robada, como ya ocurrió alguna vez en Motul, Sisal (Hunucmá), Homun, Progreso y la carretera federal Mérida-Cancún.
Los concesionarios gasolineros de la península están bajo lupa, como resultado de las investigaciones que se siguen a los tentáculos del huachicoleo.
Las ventas de gasolinaras superaron las compras a Pemex y los depósitos en efectivo de los concesionarios a las instituciones financieras, lo que evidenció que algo no cuadraba.
Ya lo dijo Hacienda, el blanqueo producto del huachicol supera los 10 mil millones de pesos, razón de peso para que no haya impunidad.
Entre las concesionarias de la península que están sujetas a revisión, aparecen en primer lugar CorpoGas de Ricardo Vega Serrador, Grupo Estratégico del Sureste (GES) de Carlos Mouriño, Enerkom de Emilio y Ricardo Gamboa García, entre otros gasolineros que se beneficiaron con el robo de gasolina a Pemex.
El Sistema de Administración Tributaria (SAT) encontró ya inconsistencias fiscales por 3 mil millones de pesos en 194 gasolineras, por lo que están bajo investigación 200 cuentas bancarias vinculadas a gasolineros.
La semana pasada Pemex en su papel de suministrador de combustible rescindió el contrato a 103 gasolineros, razón por la que hay preocupación y nerviosismo entre los empresarios que formaron parte del “cartel de gasolineras”, por lo que no sería raro que en próximos días algunas gasolineras de Campeche, Yucatán y (Cancún) Quintana Roo, también sean suspendidas.
Como resultado de esta afrenta del gobierno federal, se hace necesario que las autoridades vayan más allá del impacto mediático que ha generado la pudredumbre que hay detrás del huachicoleo, con cárcel a los responsables y clausuras o suspensiones provisionales a las gasolineras que incurrieron en este ilícito.
Los gasolineros locales no quedaron exentos de esta mafia, le entraron al negocio de comprar gasolina robada para venderla cara e incompleta a los miles de automovilistas que acudimos a sus estaciones de servicio.
Los empresarios gasolineros nos han sagrado a los mexicanos, y tuvo que venir, el presidente Andrés Manuel López Obrador, a destapar la cloaca y poner un alto a tanta corrupción e impunidad en este sector.
Nos queda claro que si la presidencia de la república la hubiera ganado, el priistas José Antonio Meade Kuribreña o el panista Ricardo Anaya Cortés, nada de esto estaría hoy a la luz pública.
Como resultado de estas acciones, el gobierno federal reporta que Pemex ha incrementado la venta de gasolina legal y ha dejado de importar gran parte del producto, mientras que en algunas regiones del norte del país ya bajó su precio.
El periódico The Wall Street Journal (WSJ) reveló esta semana que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, redujo en lo que va de enero, un 45 por ciento la importación de gasolina, según datos de la empresa de análisis Transportes de Energéticos ClipperData.
Y es que la cosa no está para bromas como dijo Tatiana Clouthier, lo que está saliendo a la luz es serio y peligroso, por lo que hay que tomar conciencia de lo grave de la situación, ya que el presidente está tocando las fibras más sensibles de la mafia del poder, un cáncer que durante años ha imperado en México, como es la corrupción y la impunidad.
El huachicoleo es apenas el primer golpe del nuevo gobierno federal y no es inverosímil pensar que la vida del presidente esté en peligro como resultado de su valentía y afrenta a los grupos de poder que controlaban y saqueaban el país.
Después de este gasolinazo, viene el Infonavit, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y otras instituciones que solo han sido un lastre para el país.
Sin reserva, espero sus comentarios, opiniones y sugerencias en vfloresh@hotmail.com

VÍCTOR FLORES HERNÁNDEZ, es periodista, fotógrafo y editor de medios con 30 años de experiencia; ha realizado coberturas periodísticas en 20 países de América, Europa y Asia.
En abril del 2015 recibió en París, Francia, la Medalla de la Paz otorgada por la OMPP, por su aportación a las misiones paz, sana convivencia entre los pueblos y publicaciones humanitarias.
Es alumno y miembro de la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI), Cartagena Colombia, Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), Miami, Florida, Red de Reporteros Sin Fronteras (Colombia) y vocero la Asociación de “Periodistas por la Paz” de la OMPP con sede en Ginebra, Suiza.
Actualmente es columnista y director del portal www.sinreserva.com.mx