- Expertos advierten un impacto considerable en las exportaciones mexicanas y los consumidores estadounidenses.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su intención de aplicar un arancel del 50% a las importaciones de cobre y un 200% a los productos farmacéuticos, según declaraciones en la Casa Blanca. Afirmó que el arancel al cobre se fijaría en 50% y confirmó gravámenes también a semiconductores.
Para los medicamentos, las empresas tendrán hasta 18 meses para trasladar su producción a EE. UU. antes de enfrentar el arancel del 200%. El arancel al cobre entraría en vigor a finales de julio. Trump justificó estas medidas bajo la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de 1962, por motivos de seguridad nacional.
La noticia sorprendió a México. El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, confirmó que conversaría con autoridades estadounidenses para obtener detalles y fijar la postura oficial. Aunque no hay notificación oficial, Ebrard no descartó impactos y enfatizó la espera de más información.
El cobre se suma al acero, aluminio y autopartes como metales estratégicos gravados por Trump. Óscar Ocampo del IMCO, aunque no sorprendido, considera el arancel un golpe importante al sector exportador mexicano. México es el tercer proveedor de cobre de EE. UU., por lo que se afectarán exportaciones y el consumidor final estadounidense pagará el costo. El año pasado, México exportó casi mil millones de dólares en productos de cobre a EE. UU.
Respecto a los medicamentos, el impacto sería significativo para productos específicos como electrolitos, jarabe para la tos y antiácidos. Un arancel del 200% “te saca del mercado”, según Ocampo.
Janneth Quiroz de Monex advirtió sobre las implicaciones inflacionarias y el posible encarecimiento de bienes. Propuso que México recurra al marco del T-MEC para interponer una queja por incumplimiento, sentando un precedente para la revisión de 2026.
Analistas coinciden en que, aunque la “seguridad nacional” es la base legal, estas medidas impactan directamente a socios como México y añaden incertidumbre a la relación bilateral. Ocampo concluyó que el gobierno debe tomar la amenaza “con seriedad” ante la imprevisibilidad de la administración.
